El valor de temperatura corporal considerado normal no es universal y en las personas se encuentra sujeto a distintas variables. Un registro más individualizado de este signo vital permitiría una manejo clínico más personalizado de los pacientes.
Quienes se desempeñan en el ámbito de la salud se han acostumbrado al carácter provisional que tienen la mayoría de los conocimientos que se adquieren. La incesante investigación y el desarrollo de nuevas estrategias que benefician a los pacientes siempre pide una permanente actualización. Es que de un año para el otro, una guía clínica, o una revisión de un determinado tema, puede caer en la obsolescencia.
Pero el debate que se genera en cuestiones que parecen fijas, e inmutables, no deja de sorprender. Es lo que sucede actualmente con la definición de muerte cerebral. Y ahora podría sumarse otro de gran importancia clínica relacionado con la temperatura corporal normal. El valor promedio de 37 grados celsius (°C) parece ir en camino a perder su estatus de universal. Hoy se admite que existen variaciones individuales de temperatura entre las personas. La magnitud depende de la edad, sexo, altura y peso. Y por si fuera poco del momento del día en que se toma el signo vital. Tanto es así, que para la práctica diaria, ya se disponen de calculadoras que tienen en cuenta todas las citadas variables. Permiten de ese modo conocer el valor considerado de referencia para cada paciente.
La adopción del valor promedio de 37 °C es algo que surge en el siglo XIX. En gran medida se debe al médico alemán Carl Reinhold August Wunderlich y el análisis de 25.000 pacientes y más de un millón de mediciones de temperatura corporal. Pero Wunderlich, más que de un valor normal, hablaba de rangos normales de temperatura. Ya notaba la presencia de registros menores en ancianos que en jóvenes, o en varones que en mujeres. Y alertaba acerca de elevaciones en las mediciones durante la tarde. Aunque lo que finalmente pasó a la posteridad, fue la cifra promedio obtenida por el médico alemán.
Pero dicho valor, fijo y universal, es puesto en tensión por algunas investigaciones. Una de estas ya señaló caídas en el promedio para la población norteamericana. A lo largo de las décadas, este descendió a 36.6 °C. Se presume que fue debido a mejoras en las condiciones de vida y a una menor presencia de inflamación. Ahora, un trabajo retoma la idea de Wunderlich y avisa que no existe un valor universal de temperatura corporal. Fue publicado recientemente en la revista JAMA Internal Medicine y lleva la firma en último término de Julie Parsonnet. Es investigadora de la Universidad de Stanford (Estados Unidos).
En el estudio, de corte transversal, se recolectó en el periodo 2008-2017 la temperatura corporal de 126.705 pacientes (57.35% mujeres, edad promedio: 52.7 años). Aquí la temperatura oral promedio encontrada para la muestra es de 36.64 °C, con un rango de variación que oscila entre los 36.24 °C y los 36.89 °C. Los resultados indican que los varones suelen tener temperaturas corporales más bajas que las mujeres. También que los valores decrecen con la edad, o la altura. Por el contrario, la temperatura corporal se incrementa con el peso y resulta más elevada durante la tarde (4 p.m.). “Los hallazgos sugieren que la temperatura oral normal varía según la edad, la altura, el peso, el sexo y la hora del día. Esto permite establecer rangos de temperatura normal individualizados”, concluye el artículo.
“La mayoría de las personas, incluidos muchos médicos, todavía piensan que la temperatura normal universal es 37 °C. Pero lo que es considerado normal, depende de la persona y la situación. Además, rara vez llega a ese valor”, comenta Julie Parsonnet, en una nota publicada por la Universidad de Stanford.
La fiebre es una manifestación cardinal de distintas patologías y frecuentemente influye en el diagnóstico y el inicio de tratamientos. Por eso, esperan que la presente investigación contribuya a instalar un registro más personalizado de la temperatura corporal. Para tal fin, ya se encuentran disponibles en la práctica clínica calculadoras que brindan valores normales individuales. Tienen en cuenta algunas variables analizadas aquí. Creen que su empleo facilitaría un manejo clínico más personalizado de los pacientes. “Un hombre delgado de 80 años podría tener una temperatura corporal más baja por la mañana, en comparación con una mujer de 20 años, obesa y que es examinada por la tarde”, recuerda Parsonnet, en el estudio.
Medicina intensiva
Infectología
400 horasLey C, Heath F, Hastie T, Gao Z, Protsiv M, Parsonnet J. Defining Usual Oral Temperature Ranges in Outpatients Using an Unsupervised Learning Algorithm. JAMA Intern Med. Published online September 05, 2023. doi:10.1001/jamainternmed.2023.4291
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